UGT Y CCOO solicitamos garantías salariales para las GBUS

En respuesta a la petición de CCOO y UGT, la Dirección de Relaciones y RRHH de las GBUs, ha mantenido una reunión con ambas organizaciones para abordar de manera ordenada un debate sobre la inflación económica que hemos padecido en el año 2021 y estamos padeciendo en el 2022, y que en nuestras condiciones salariares no se están reflejando.

Para UGT y CCOO el paradigma de las revisiones salariales tal y como se han establecido hasta la fecha ha de ser modificado por la situación económica que atraviesa el país y en general la economía mundial y que ha supuesto en el caso de España que el IPC y por la tanto la inflación se haya disparado a porcentajes tremendamente penalizadores para las economías familiares.

Desde CCOO y UGT, hemos solicitado un cambio en el modelo, que reconozca revisiones salariales para todas las personas trabajadoras en línea con el Grupo Telefónica en España, introduciendo elementos correctores que cubran las diferencias en la subida que se pueda pactar y el devenir del IPC en los próximos años.

Si bien es cierto que la empresa ha escuchado atentamente nuestros planteamientos, también ha expresado las dificultades que supone aumentar los presupuestos en costes laborales en un entorno de altísima competitividad, con un mercado que no alcanza los objetivos establecidos y con líneas de control presupuestario muy estrictas.

Durante el avance de la conversación han confirmado que su margen es trabajar sobre un lineal de un 1%, en el que quedarían excluidas las personas con malas performance o con salarios por encima del 120% de la media salarial, guardando un 0´5 adicional para un reparto gestionado por la estructura.

Desde UGT y CCOO, entendemos y así lo hemos puesto sobre la mesa que, el escenario porcentual que se ofrece es claramente insuficiente, y por ello hemos solicitado un nuevo esfuerzo para:

Mejorar el porcentaje de revisión, alineándonos con el resto de las empresas del grupo, independientemente del perímetro al que cada una esté vinculada.

Dotar de un espacio temporal al acuerdo que vaya más allá del 2022, buscando estabilidad y confianza, en los equipos.

Y, en cualquier caso, integrar en el posible acuerdo garantidas o factores de corrección con respecto a los próximos escenarios de inflación que se puedan producir.