La UE confirma el liderazgo de España en fibra y telecomunicaciones

El último informe oficial publicado por la Comisión Europea confirma la potencia, capilaridad y calidad de las redes de telecomunicaciones españoles, sobre todo cuando se confrontan con las de nuestros vecinos del continente.

El Study on Broadband Coverage in Europe1https://ec.europa.eu/digital-single-market/en/news/study-broadband-coverage-europe-2018, correspondiente al año 2018, nos presenta un escenario en donde nuestro país destaca por sus redes de fibra óptica2La Comisión Europea usa el término FTTP que, aunque resulta semejante al FTTH desplegado en España, es inferior en cuanto a alcance físico; https://es.wikipedia.org/wiki/FTTP, situándose en el segundo puesto de toda la Unión y 48 puntos porcentuales por encima de la media europea.

No obstante, este segundo puesto en realidad es un primer puesto absoluto en términos comparables de población y extensión geográfica. Así, la comparativa se ciñe a la penetración de la fibra en los hogares en términos de porcentaje, un dato que puede resultar algo engañoso. De hecho, Letonia, el primer país en la gráfica, no llega a los dos millones de personas censadas, que viven en 750.000 hogares (por los 47 millones de habitantes y los 18 millones de hogares de España3https://es.wikipedia.org/wiki/Espa%C3%B1a; https://es.wikipedia.org/wiki/Letonia) y su perfil geomorfológico es muy diferente (su superficie total es 8 veces más pequeña que España, repleta de llanuras y planicies y su punto más elevado a duras penas supera los 300 metros sobre el nivel del mar4https://es.wikipedia.org/wiki/Colina_Gaizina). Por tanto, comparar Letonia, la situada en primer puesto, con España, resulta un ejercicio más que matizable. Es más, si se contrastan los datos de España con otros países semejantes (como los de la denominada UE5, destacados en azul moteado o Polonia; PL) se observan un diferencial que, en algunos casos como el del Reino Unido y Alemania, supera los 70 puntos porcentuales.

El esfuerzo hecho por los operadores españoles a la hora de desplegar estas redes de última generación se observa la perfección en la siguiente gráfica: partiendo de unos porcentajes similares de penetración de fibra en 2012, España se destaca a base de miles de millones de inversión hasta triplicar los datos de penetración de la media europea en 2018:

No obstante, aún queda un debe con otros países de Europa: el relativo al despliegue en zonas rurales. En este caso, seis países nos superan en capilaridad, aunque es justo indicar que la penetración de la fibra en el rural español (32,6%) es mayor que la media europea general (29,6%), superando además la media urbana de penetración de 14 Estados Miembros de la Unión (ver gráficas anteriores).

Finalmente, es obligado señalar que la fortaleza de nuestro país no solo se circunscribe a la fibra óptica, sino que se extiende a casi todas las tecnologías y prestaciones de banda ancha fija y móvil, tanto el ámbito rural como en el general. Salvo en los casos de las tecnologías obsoletas (DSL, VDSL) en casi todos los indicadores propuestos España supera la media europea, situándose muy por encima en velocidades superiores a los 100 Mbps.

UGT Comunicaciones